Nosotros NO Negociamos

¿Cuántas veces escuchamos esa frase?, y más en estos últimos tiempos. "Nosotros nos negociamos con terroristas", "No van a cambiar nuestra forma de vida". ¿Coraje o terquedad?, ¿Qué significa esto?. Se busca defender los intereses de los Estados, pero ¿a costa de qué?. ¿Cuántas vidas ya se cobró el terrorismo?. ¿Sirve el "no negociar"?, ¿Qué es negociar con terroristas?. Nos ubica en una posición dual, porque mientras defendemos la democracia y la pluralidad nos cerramos al diálogo con otras facciones. Pero claro, ¿Cómo vamos a negociar con terroristas? Ellos mismos están matando a nuestros ciudadanos. ¿Ellos?, ¿Estamos seguros que son ellos?, ¿O simplemente queremos evadir nuestras resposabilidades y delegarlas en hombros de otros?. Somos víctimas que no piensan en por qué sucede lo que sucede, sólo queremos justicia, nuestra "justicia".

Está visto que la guerra contra el terrorismo NO sirve. Irak, Afganistán, sólo engendraron más violencia. El problema es creer que no ir a la guerra es quedarse de brazos cruzados. Y de nada sirve cortar las malezas de cuerpo y no de raíz, porque luego crecen más fuertes. ¿Qué es lo que engendra el terrorismo?, ¿Por qué?. Esas son las preguntas claves para encontrar la raíz del asunto. Pero claro, es mucho más sencillo ser víctima y buscar venganza. ¡Maduremos!. Seamos responsables de los actos que cometemos. El 11 de septiembre, el 11 de marzo y el 7 de julio no fueron por nada (lo cual no justifica de todos modos los acontecimientos terroristas). Y cerrarnos al diálogo y decir no negociamos es caer en el mismo error, es provocar de vuelta. ¡Paremos las injusticias!. Que otros las cometan no nos da el derecho a nosotros de cometerlas. La ley del más fuerte no sirve. Ojo por ojo el mundo se queda ciego.

Hay otras formas de actuar para erradicar al terrorismo, para convertirlo en un recuerdo viejo. Pero antes que nada tenemos que decidir qué es lo que nos mueve, qué defendemos. ¿La economía occidental?, ¿La política europea?, ¿El estilo de vida norteamericano?. No. Porque el terrorismo no sólo atenta contra occidentales, atenta a todo el mundo. Tanto del bando que los comete, como del que se defiende hay bajas. Hay entonces algo por sobre todo eso. Por sobre la economía, la política, la cultura... y es la Vida.

Defender la vida significa poner la vida de cada ser humano por encima de todo. La vida debe ser lo primero. Debe estar por encima de la economía, de la política, de la cultura, de todo. Sólo si defendemos la vida, sólo si realmente priorizamos la vida vamos a poder ver al terrorismo y a la guerra como algo viejo, incivilizado. Es un largo camino por recorrer, que no nos asuste dar el primer paso, vale la pena morir por la vida.